La confianza en el mercado laboral acaba de atravesar un bache. Encuestas recientes muestran que apenas un tercio de los estadounidenses—solo un 33%—cree que ahora es un buen momento para conseguir un empleo de calidad. Es la cifra más baja que hemos visto en más de cuatro años.

Esta caída señala un cambio en la percepción sobre las oportunidades de empleo. Ya sea por congelaciones de contrataciones, despidos en ciertos sectores o simplemente incertidumbre económica general, la gente no se muestra optimista respecto a sus perspectivas profesionales. Este tipo de indicador de confianza suele moverse en consonancia con las condiciones económicas generales, y merece la pena seguirlo de cerca mientras avanzamos hacia 2025. Cuando los buscadores de empleo se vuelven pesimistas, normalmente esto repercute en el gasto de los consumidores y en el sentimiento del mercado.