¿Qué se necesita para que los agentes autónomos participen realmente en la actividad económica? Es necesario contar simultáneamente con un "cerebro" que posea capacidad de juicio y unas "manos" que lo ejecuten.

El proyecto Talus está desarrollando una infraestructura que cubre exactamente estos dos elementos clave. En un reciente informe de análisis de Messari también se destaca este enfoque del proyecto, señalando que para que la economía de agentes funcione correctamente, una capa de integración como esta es imprescindible.

Un sistema que solo piensa pero no puede actuar, o que ejecuta sin reflexión, es incompleto. Una estructura que abarque ambos aspectos será fundamental para la infraestructura de la economía autónoma en el futuro.