La caída abrupta del mercado anoche pilló a muchos desprevenidos, pero la verdadera tormenta podría estar aún por llegar.

Según fuentes del mercado, es muy probable que el Banco de Japón anuncie una subida de tipos de 25 puntos básicos en la reunión de política monetaria del 19 de diciembre, elevando la tasa de interés oficial hasta el 0,75 %, el nivel más alto desde 1995. No subestimes este movimiento, ya que la reacción en cadena que puede provocar podría ser mucho más intensa de lo que imaginas.

Con la subida de los tipos de interés del yen, es inevitable que el tipo de cambio del yen se fortalezca. Aquí viene el problema: durante mucho tiempo, un gran volumen de capital global ha estado jugando al arbitraje — pidiendo prestado yenes a bajo interés, cambiándolos por dólares u otras divisas, e invirtiendo en activos de riesgo para aprovechar la volatilidad. El reciente rebote de activos cripto como BTC y ETH se ha debido en gran parte a estos fondos de arbitraje.

Ahora que el coste de financiación en yenes aumenta y el margen de arbitraje se reduce, estos fondos se ven obligados a retirarse. Lo peor es que, en cuanto comiencen los cierres masivos de posiciones, la liquidez del mercado se estrechará de inmediato y la volatilidad se amplificará como una reacción en cadena. Los operadores con alto apalancamiento podrían ser liquidados sin ni siquiera tener tiempo de reaccionar.

En este momento, la estrategia más prudente es: reducir el apalancamiento, establecer stops de protección por adelantado y no soñar con aguantar la posición. El mercado no te dará explicaciones, solo te enseñará con dinero real lo que significa que “sobrevivir es lo más importante de todo”.