¿#比特币对比代币化黄金 Diez mil euros pueden convertirse en cien mil? No te rías todavía, primero escucha este problema de matemáticas.

Últimamente mucha gente anda difundiendo una "fórmula para hacerse rico": tomas 10.000 RMB y los cambias por USDT, compras a 6,95 y consigues 1.438 USDT, luego los vendes con tarjeta de Hong Kong a 7,83 y al instante tienes 11.266 HKD, que al cambiar de nuevo a RMB se convierten en 10.232 RMB—ganancia neta de 232 RMB en una sola operación, una rentabilidad del 2,32%.

¿Parece sencillo y directo? Alguien hizo las cuentas: usando la fórmula del interés compuesto (1+0,0232)^10, tras diez operaciones el capital asciende a 12.577, ¡más de 2.500 de beneficio! ¿Y si lo haces cien veces? ¿La libertad financiera está al alcance de la mano?

Las matemáticas no fallan. Pero la realidad puede hacerlas callar.

Los “costes ocultos” que no has contado, son los que realmente te devoran

La diferencia de tipo de cambio es real, pero los beneficios se los comen tres cosas:

El agujero negro de las comisiones—en cada cambio, cada transferencia internacional, las comisiones bancarias y las tarifas de las plataformas se acumulan; esos 232 RMB de beneficio tal vez ni cubran los costes.

La volatilidad del tipo de cambio—6,95 y 7,83 son solo instantáneas de un momento; cuando realmente operes, puede que el mercado se vuelva en tu contra y lo que ayer era arbitraje hoy sea un agujero de pérdidas.

El puño de hierro de la regulación—realizar operaciones frecuentes y de grandes sumas activa los sistemas de prevención de blanqueo de capitales en cuestión de minutos; cuentas bloqueadas, fondos retenidos, y ni siquiera tendrás oportunidad de reclamar.

De cien operaciones, solo el 60% sale indemne

Supongamos que la probabilidad de ser detectado en una sola operación es del 0,5% (y eso siendo optimistas):

Diez operaciones, tasa de supervivencia del 95,11%—¿parece aceptable?
Cien operaciones, la tasa se desploma al 60,57%—casi la mitad acaba cayendo.
Mil operaciones, solo queda un 0,665%—prácticamente es como jugarte tu dinero a la lotería.

Las matemáticas no engañan, pero la probabilidad sí.

La historia real de mi amigo Wang: tres operaciones, perdió 5.000

La primera ganó 200, la segunda 300, y pensó que había dado con la clave. En la tercera, el precio del USDT se desplomó de repente, y antes de poder reaccionar el banco le llamó—cuenta bloqueada por actividad sospechosa, le pidieron pruebas del origen de los fondos.

Tras dos meses de trámites para desbloquear la cuenta, acabó perdiendo 5.000 RMB en comisiones y costes de intereses.

“Pensé que había encontrado una máquina de hacer dinero, y acabé siendo yo el que ponía el dinero.” Así lo resumió Wang.

¿De verdad te atreves a ir a por este dinero?

No te dejes cegar por esa rentabilidad del 2,32%—el tipo de cambio, la regulación y las comisiones son tres montañas gigantes, y que se derrumbe solo una puede aplastarte.

El arbitraje frecuente entre plataformas y jurisdicciones puede considerarse actividad ilegal; lo más absurdo sería acabar detenido antes de ver un euro.

La seguridad del capital siempre debe ser lo primero. Mejor ganar menos, que jugarse la “tasa de supervivencia”—porque tener la vida para ganar dinero y no poder gastarlo es, en este juego, el final menos deseable.