¿Te atreverías a firmar un contrato lleno de caracteres ilegibles?
En la vida real, nadie haría algo así, pero en el mundo cripto, esto ocurre todos los días. Abres tu cartera y, de repente, aparece una pantalla con un montón de caracteres hexadecimales incomprensibles, bajo el título "Interacción con contrato". Dudas un par de segundos, pero al final pulsas confirmar: puede que estés realizando una transferencia, o quizás estés autorizando a alguien a utilizar tus fondos sin límites, o incluso entregando el control de tu cartera.
Esto es lo que dentro del sector se conoce como “firma ciega”. No es un bug de alguna cartera poco conocida, sino una bomba de relojería oculta en toda la industria blockchain.
**¿Por qué ocurre la firma ciega?**
Las instrucciones para invocar un contrato inteligente son, en esencia, una cadena comprimida de código binario. La cartera recibe ese código y te lo muestra tal cual: una serie de caracteres incomprensibles. Una persona normal no tiene forma de entender qué operación está autorizando.
¿El resultado? Ataques de phishing, autorizaciones falsas, contratos maliciosos... Ya se han esfumado decenas de miles de millones de dólares de las manos de los usuarios. Muchos aún no saben cómo perdieron su dinero.
**Distintas blockchains, distintos problemas**
Tomemos Ethereum como ejemplo: es el pionero de los contratos inteligentes, pero los datos de las transacciones solo incluyen dos partes: el selector de función (los primeros 4 bytes) y la lista de parámetros (dividida en bloques de 32 bytes). ¿Quieres traducir estos bytes a lenguaje humano? Necesitas la ABI (Interfaz Binaria de Aplicación). El problema es que la ABI no es un dato estándar almacenado en la cadena: la cartera debe mantener su propia base de datos o depender de servicios de terceros. Si se trata de un contrato nuevo o un proyecto poco conocido, el usuario sigue viendo jeroglíficos.
Solana e ICP tienen otra lógica. La estructura de transacciones de Solana es más flexible, pero también mucho más difícil de interpretar; ICP, aunque ha mejorado ciertos aspectos de su diseño, todavía no dispone de herramientas suficientemente maduras en su ecosistema.
Sea cual sea la cadena, el núcleo del problema es el mismo: existe un abismo enorme entre la tecnología y la comprensión del usuario.
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BagHolderTillRetire
· hace16h
Firmar a ciegas es realmente una locura, es como firmar un contrato que no entiendes al borde de la vida o la muerte, y encima tienes que rezar para no ser estafado.
Ya estoy tan atrapado que no quiero aprobar nada más, cada vez que salta la ventana del monedero la reviso tres veces antes de atreverme a pulsar.
El ABI, en definitiva, es la excusa de los fabricantes de monederos para eludir su responsabilidad; ¿por qué los usuarios tienen que pagar por la inmadurez tecnológica?
Lo que más miedo da en los nuevos proyectos es esto: si te equivocas al establecer el límite de autorización, ese activo queda monitorizado para siempre; casi es mejor dar por perdido ese dinero.
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RugpullSurvivor
· 12-05 07:56
Joder, otra vez una firma a ciegas. Ya me han aprovechado tres veces, ahora en cuanto veo hexadecimal, salgo corriendo.
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SelfMadeRuggee
· 12-05 03:55
De verdad, tengo demasiadas historias tristes por firmar a ciegas; una vez no retiré los permisos de autorización y mi cartera se convirtió directamente en un cajero automático.
Si no entiendes el contrato, mejor no lo firmes, pero aún así hay gente que por prisa lo hace, bien merecido.
En ICP realmente las herramientas no funcionan, en Solana hasta analizar es complicado, y en Ethereum seguimos dependiendo de terceros para salvarnos.
La "facilidad de uso" de Web3 es para morirse de risa; siempre hay que elegir entre seguridad y comodidad.
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FUD_Vaccinated
· 12-05 03:51
Joder, por eso siempre les digo a mis amigos que no pulsen "confirmar" a la ligera.
En un segundo puedes regalar tu cartera, así de absurdo es este sector.
La verdad, el tema del ABI debería haberse resuelto hace tiempo, ¿todavía dependemos de bases de datos de terceros? Es de risa.
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DoomCanister
· 12-05 03:44
Es increíble, firmar a ciegas es como enviar una invitación a los hackers. Ya ni me atrevo a usar mi monedero.
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RektButSmiling
· 12-05 03:43
Ya he sido atormentado por el miedo a las firmas ciegas, ahora cada vez que veo una autorización empiezo a sudar frío por reflejo.
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SatsStacking
· 12-05 03:31
Siempre lo mismo, ya estoy harto. ¿Por qué nadie hace una cartera que se entienda?
¿Te atreverías a firmar un contrato lleno de caracteres ilegibles?
En la vida real, nadie haría algo así, pero en el mundo cripto, esto ocurre todos los días. Abres tu cartera y, de repente, aparece una pantalla con un montón de caracteres hexadecimales incomprensibles, bajo el título "Interacción con contrato". Dudas un par de segundos, pero al final pulsas confirmar: puede que estés realizando una transferencia, o quizás estés autorizando a alguien a utilizar tus fondos sin límites, o incluso entregando el control de tu cartera.
Esto es lo que dentro del sector se conoce como “firma ciega”. No es un bug de alguna cartera poco conocida, sino una bomba de relojería oculta en toda la industria blockchain.
**¿Por qué ocurre la firma ciega?**
Las instrucciones para invocar un contrato inteligente son, en esencia, una cadena comprimida de código binario. La cartera recibe ese código y te lo muestra tal cual: una serie de caracteres incomprensibles. Una persona normal no tiene forma de entender qué operación está autorizando.
¿El resultado? Ataques de phishing, autorizaciones falsas, contratos maliciosos... Ya se han esfumado decenas de miles de millones de dólares de las manos de los usuarios. Muchos aún no saben cómo perdieron su dinero.
**Distintas blockchains, distintos problemas**
Tomemos Ethereum como ejemplo: es el pionero de los contratos inteligentes, pero los datos de las transacciones solo incluyen dos partes: el selector de función (los primeros 4 bytes) y la lista de parámetros (dividida en bloques de 32 bytes). ¿Quieres traducir estos bytes a lenguaje humano? Necesitas la ABI (Interfaz Binaria de Aplicación). El problema es que la ABI no es un dato estándar almacenado en la cadena: la cartera debe mantener su propia base de datos o depender de servicios de terceros. Si se trata de un contrato nuevo o un proyecto poco conocido, el usuario sigue viendo jeroglíficos.
Solana e ICP tienen otra lógica. La estructura de transacciones de Solana es más flexible, pero también mucho más difícil de interpretar; ICP, aunque ha mejorado ciertos aspectos de su diseño, todavía no dispone de herramientas suficientemente maduras en su ecosistema.
Sea cual sea la cadena, el núcleo del problema es el mismo: existe un abismo enorme entre la tecnología y la comprensión del usuario.