La verdad es que las operaciones de Bitdeer en estos últimos años han sido realmente visionarias. Ya hace unos años empezaron a retirarse discretamente del negocio tradicional de la minería de Bitcoin y de los equipos de minería, trasladando su enfoque hacia el poder de cómputo para inteligencia artificial. Mirando atrás ahora, esa jugada fue realmente acertada.

Convertirse en uno de los pocos socios de servicios en la nube de Nvidia en el sudeste asiático no es algo que cualquier centro de cómputo pueda lograr. ¿Cuánto trabajo y acumulación de experiencia hay detrás de eso? Recuerdo que en una noticia reciente, el otro Cloud Partner de Nvidia en Singapur es Megaspeed, y su primera compra de chips ascendió a 1.000 millones de dólares. Ese nivel no es cualquier cosa.

Si Bitdeer no tuviera un plan de compras de chips de IA a la escala suficiente como respaldo, no tendría ninguna posibilidad de entrar en la lista de socios de Nvidia en Singapur. Hay que saber que obtener ese estatus significa que tu solidez financiera, tu escala de negocio y tus capacidades técnicas tienen que ser sobresalientes.

El paso de la minería al poder de cómputo para IA no ha sido fácil, pero Bitdeer ha sabido marcar el ritmo adecuado. Al fin y al cabo, en esta era, quien controla la capacidad de cómputo, controla la voz.