¿El fin de una era? La ballena originaria de Bitcoin liquida $1.3B mientras Wall Street silenciosamente compra

Owen Gunden, quien hace una década era considerado uno de los 8 hombres más ricos en cripto, acaba de hacer algo impensable: vendió sus 11,000 BTC completos (aproximadamente $1.3 mil millones) entre finales de octubre y esta semana. Su último movimiento —2,499 BTC por $228 millones enviados a Kraken el jueves— marca el cierre de una de las historias más icónicas del Bitcoin.

El Drama de la Salida de Gunden

Gunden no es cualquier ballena. Fue trader de arbitraje en los días salvajes de Mt. Gox y Tradehill, acumulando decenas de miles de BTC entre 2011 y 2014. Durante años fue el símbolo del early adopter que “se quedó con el premio”. Ahora, con Bitcoin cayendo un 30% desde sus máximos de $126,000, decidió que era hora de salir.

Arkham Intelligence confirma: su billetera está completamente vacía. No le queda ni un satoshi.

El Timing es Brutal: Bitcoin en “Pánico Extremo”

Mientras Gunden líquida, el índice Bull de CryptoQuant ha colapsado a 20/100 —clasificado como “extremo bajista”, el nivel más bajo del ciclo 2025. El sentimiento:

• Confianza de ballenas en mínimos históricos
• Bitcoin negociándose a $86,444
• $2.8 mil millones en salidas de ETFs en noviembre
• Retailers en capitulación total

Pero Aquí Está Lo Raro: Los Grandes Dineros Están Comprando

Mientras el mercado entra en pánico, algo extraño ocurre en Wall Street: la propiedad institucional en ETFs de Bitcoin spot de EE.UU. ha alcanzado un récord del 40%, aumentando desde apenas 27% hace seis meses.

Raíces profundas en los datos:

• Solo empresas con >$100M en AUM reportan estas posiciones
• Muchos inversores institucionales menores no figuran en los registros
• La penetración real de Wall Street probablemente es mucho mayor

La Realidad Sin Filtros

Gunden se va. Los retailers entran en pánico. Pero JPMorgan, BlackRock y decenas de fondos de pensiones siguen comprando en la debilidad.

Este es el cambio de guardia: de los early adopters al capital profesional. Bitcoin ya no es el juego de Gunden. Es el juego de las instituciones.

La pregunta ahora es: ¿cuándo se da cuenta el mercado retail de que ya perdió la partida?